Presentación








.... El documental ha sido presentado en el festival de cine pobre de Cuba en el marco de su muestra y ahora ha sido seleccionado para la competencia de documentales regionales del Festival de Cine de Viña del Mar en Chile. Además ha sido solicitado para otros festivales como
Docusur y Extremadoc ambos de España.

Nuestro trabajo se enmarca en el documental social y aborda temáticas y problemáticas universales, sin ninguna pretensión estética ,si no mas bien un férreo análisis y critica de las desigualdades y políticas burocráticas de nuestro sistema.
Los actores principales y el hilo conductor de sus historias son las propias personas que
desnudan sus almas y nos hacen participe de sus logros.

Cabe destacar que el trabajo fue concebido por un equipo de 3 personas. Es un trabajo a pulso y que responde a la temática del cine social de autor e independiente. Como principal slogan está la humildad y el trabajo.


Sinopsis:
“Toma de razón” es el testimonio de perseverancia y de lucha de miles de familias de pobladores de la Toma de Peñalolén, a través del relato de cuatro de sus protagonistas, que en el aparente apogeo de la Transición Chilena, pusieron al desnudo las debilidades, falencias y compromisos de la política habitacional del Estado.

Ficha técnica:

Dirección: Andrés Aros González
Producción: Leonardo Gamboa - Iñigo García
Formato: DV
Duración: 53 min.
año:2006
país:Chile



www.productoradinamoaudiovisual.cl
productoradinamo@gmail.com


El día jueves 25 de Octubre se presentará en el marco del Festival de Cine de Viña del Mar
Competencia Documentales de Regiones de Chile.
Lugar:DuocUC Sede Viña del Mar, Álvarez 2366 ,Chorrillos.
hora:19:30

http://www.festivalcinevinadelmar.cl/


MOTIVACIÓN...


En el largo tiempo que ha transcurrido desde que concebimos esta iniciativa hasta la fecha, numerosos veces nos hemos reunido para conversar sobre lo que ha significado esta experiencia documentalista, en especial, cuando ha coincidido con alguna grata noticia, como la aceptación en algún festival de cine o el establecimiento de un nuevo contacto interesado en difundir o distribuir nuestro trabajo en países un tanto remotos.


Y es así como nos hemos encontrado con sorpresas tan inverosímiles como tener la posibilidad de que “Toma de Razón” sea traducida al idioma persa o que, en contraste, no pueda ser exhibida en la TV iraní debido a las concepciones religiosas y normativas imperantes en aquella nación (por ejemplo, para ellos los atuendos femeninos mostrados en el documental son ¡inconcebiblemente sugerentes!).


Mas allá si uno comulga con estas visiones y planteamientos (cuestión que no viene al caso), los aspectos que siempre nos hemos cuestionado en nuestras conversaciones son fundamentalmente dos: ¿por qué diantre, un día nos sentimos motivados y dispuestos a hacer todo esto? Y, también, ¿Cómo lo hicimos?


Sobre el primer punto, evidentemente, en un principio no podíamos anticipar los logros que, afortunadamente, hemos alcanzado (aunque obviamente habían anhelos y expectativas de por medio). En ese entonces, intuíamos que el traslado de millares de pobladores desde la principal toma de terrenos post-dictadura en Santiago era un acontecimiento interesante de registrar en si mismo, pero también estábamos convencido de que el tratamiento mediático que se le estaba dando al hecho adolecía de imparcialidad y tino, prevaleciendo la típica mirada tergiversada, estigmatizada y discriminatoria sobre el mundo popular (cuantas veces contamos con el- para nada malintencionado- consejo familiar: “cuídese mijito, cuando vaya para la Toma”).


De cierta manera, había todo un espacio por cubrir, otorgándoles a los propios pobladores la posibilidad de ser los relatores de sus propias vivencias y experiencias, evocando sus recuerdos y sus nostalgias ante el inminente cambio. Pero, para esto era fundamental acceder a ellos y, sobre todo, ganarnos su confianza.


Y es aquí, donde empieza a tomar cuerpo el segundo aspecto (tal vez, el más difícil de conseguir) puesto que no se trataba, en este caso, de los medios con los que nosotros contábamos, sino que de la posibilidad de que ellos comenzaran a confiar y creer en este proyecto (o que, por último, vieran cierta utilidad o provecho a la hora de materializar el documental), permitiéndonos ingresar a sus casas y conocer a sus familias, revolviendo los recuerdos y las historias personales/familiares que, al calor de la Toma, se fueron forjando (recuerdos que, alguna veces, fueron un lejano destello de la memoria emotiva y que, en otros casos, se buscaban olvidar).


Creemos que la confianza fue un acto construido paulatinamente, pero que tuvo como pilar fundamental el respeto mutuo, demostrándoles, desde el primer día en que pudimos conversar con ellos, que nuestro interés era concebir un trabajo en conjunto, donde, de alguna manera, nosotros poníamos los medios y recursos técnicos y ellos ponían sus historias, sus recuerdos y emociones.


En este sentido, “Toma de Razón” no es un documental que se base en colosales pretensiones estilísticas y mucho menos en la incesante búsqueda de un lugar privilegiado en el circuito de la industria audiovisual. Es un documental testimonial que, en todo momento, intentó captar las vivencias y expectativas de los propios protagonistas de un hecho sumamente relevante en la larga historia del movimiento poblacional nacional, un testimonio que apela a las emociones y sentimientos de los pobladores. ¡A todos ellos, mil gracias por la posibilidad de conocerlos!


Coincidimos que, al final, lo que prevalece es el fiel testimonio de que muchos de las personas que pasaron por la Toma tuvieron la posibilidad de re-constituirse en valiosos sujetos de esfuerzo y de lucha, sacando a relucir sus potencialidades y sus capacidades personales y grupales (planteándose, para el futuro, nuevos anhelos objetivos y metas). En otras palabras, la valiosa lección de que el ser humano es un ser que puede ir cambiando en la medida que se compromete con sus cercanos a alcanzar algo en conjunto y en común (algo que, por lo demás, no signifique un detrimento para otros).


Por nuestra parte, queda la sensación de que hemos ganado mucho como equipo de trabajo y como amigos, pero, en especial, el interés de concebir nuevos trabajos y desafíos, los que esperamos se materialicen pronto y que no sean solo palos de ciego1.

1 Nombre tentativo, de un futuro proyecto de documental.

3 comentarios:

Antonio Hupe dijo...

Amigos.
Felicidades
¿Cómo se consigue?
Abrazo, R+.

Dr Ried dijo...

Puta que buena!!!

Al igual que el cabezon. ¿Como se consigue?

Avisen y postulen a alguna cosiaca por acá en Bogotá, esta es su casa.

Saludos y felicitaciones!!

monseñor pedofulus dijo...

se pasaron cabros.
Ojala, lo muestren luego.
Saludos